No me apasiona tu despreocupación por mí; nunca comprendo porque me tratás así. Esta vez te diré, recapacitaré, voy a buscarte en mi silencio y en tus ojos ciegos. Agua clara bajo el puente y en el puente vos y yo, enturbiando nuestras almas; complicándonos los dos. Quisiera llevarme algo, siempre pienso que hoy es la ultima vez.... ¡siempre es la ultima vez!